Biodiesel
El biodiesel es un tipo de combustible de tipo líquido que se procede de la transesterificación o esterificación de los triglicéridos del aceite, ya sean éstas grasas de origen animal o vegetales, a veces no es necesario estos procesos previos para obtener el producto. El producto que se consigue es muy similar al gasóleo, que se obtiene a través del petróleo, así el biodiesel puede ser utilizado en automóviles, en los motores conocidos como de ciclo diésel.
El proceso de transesterificación se realiza al combinar los aceites, con un alcohol de tipo ligero, que suele ser metanol, dejando como residuo a glicerina, la cual se suele aprovechar por ejemplo, en cosmética. En cuanto a la fuente de donde obtenemos el aceite vegetal, suele ser el aceite de colza, ya que es una de las plantas con mayor rendimiento en cuanto a aceite se refiere, por número de hectáreas, pero también es posible utilizar aceites que ya han sido utilizados, como los aceites que se usan para cocinar y hacer frituras, pero en dicho caso, la materia prima es bastante menos costosa y además se pueden reciclar, cuando en otros casos esos no serían más que residuos.
La utilización del biodiesel tiene sus ventajas, pues es un combustible ecológico, así que no daña al medio ambiente, ya que es un carburante 100% puro de origen vegetal. Cuando se usa en dicho estado, éste es totalmente inocuo para nuestro medio ambiente.
En cambio, para que éste se utilice en los motores diésel, éstos deberían sufrir una serie de pequeños cambios técnicos, como por ejemplo, modificar los compuestos que forman los manguitos y latiguillos de goma o caucho, que participan en el circuito del paso de combustible. Se debería realizar este cambio debido a que el biodiesel, cuando es 100%, podría disolver las gomas. De hecho ya desde los años 90, gran parte de los fabricantes de vehículos, especialmente los de marcas alemanas, han conseguido cambiar dichos conductos por materiales plásticos o derivados de éstos, de manera que el biodiesel no pueda disolverlos. En algunos países, frente a la imposibilidad de controlar que todos los coches se encuentren preparados para repostar biocarburante, se suele comercializar una mezcla que consiste en Bionor MX-15, que en sí es una mezcla de un 12% del biodiesel más un 88% de gasóleo, pudiendo de dicha manera, ser utilizado por cualquier tipo de vehículo sin problema alguno.
El biodiesel se fabrica partiendo de aceites de tipo vegetal, ya sean éstas vírgenes o procedentes de previo reciclaje. El aceite vegetal cuando es virgen, viene extraído de la semilla cultivada, siendo las más frecuentes las semillas de colza, girasol, o palma, aunque existen más de trecientos tipos diferentes de semillas oleaginosas.
En cambio, los aceites que proceden del reciclaje, se recogen de diferentes sectores, como el hostelero, alimentario doméstico, etc. Con dicho reciclaje, evitamos que se produzcan vertidos, previniendo así la contaminación de las aguas subterráneas, marinas, etc., y todo lo que dicha contaminación conlleva.
Con los aceites de origen vegetal, se ayuda de gran manera a un suministro energético sostenible, cosa que permite que se reduzca la dependencia actual al petróleo, además de aumentar la seguridad y amplia diversidad en los suministros. También se contribuye al desarrollo social y económico de las áreas rurales, gracias a la producción de las semillas, sin pasar por alto quizás el punto más importante, que es la conservación del medio ambiente.
Otra de las grandes ventajas del biodiesel es que no contiene azufre, elemento que se encuentra en el gasóleo debido al poder lubricante de éste. De hecho, los gasóleos más modernos, han bajado el contenido de azufren, incrementando de esta manera el ruido del motor, y por consiguiente su desgaste prematuro. Por este motivo, las compañías petroleras se ven obligadas a añadir aditivos químicos a los gasóleos, para poder solucionar los problemas que conlleva.
Entre otras ventajas podemos destacar la reducción de emisiones de hollín que se produce al mejorar la combustión, con los que se consigue que se emita menos de la mitad que con otros combustibles, haciendo desaparecer el típico humo negro, acompañado de los desagradables olores. También disminuye considerablemente la cantidad de CO2 emitida, la cual se controla también gracias al protocolo de Kyoto, donde el biodiesel es una gran solución, pues no contribuye tampoco al efecto invernadero.
El biodiesel al no contener bencenos u otras sustancias de tipo aromáticas, que suelen ser cancerígenas, disminuye la posibilidad de diferentes tipos de enfermedades, sobre todo las de tipo respiratorio y alergias. Además, cabe destacar que el biodiesel es muy fácilmente biodegradable, no suponiendo peligro alguno en caso de accidente o derrame.
A pesar de todas sus ventajas, también posee algunas desventajas, como que a bajas temperaturas, puede iniciar a solidificarse, formando cristales que pueden llegar a obstruir los conductos de los motores. Las propiedades solventes que poseen los biodiesel, consiguen ablandar algunos materiales, como el caucho o la espuma de poliuretano, por lo que se necesita cambiar a materiales adaptados para su correcta utilización como carburante. Y aún hoy en día sus costos son elevados comparados con el diesel procedente del petróleo.