Formación y descomposición del ozono
La biosfera, toda la vida sobre nuestro planeta, fue posible gracias a la formación del ozono de la estratosfera. El ozono nos da protección frente a las radiaciones (UV), las cuales son dañinas para nuestras moléculas.
Se cree que el ozono se formó seguidamente a la liberación del oxígeno a la atmósfera, que tuvo lugar entre los 2000 y 600 millones de años antes a nuestra época.
La culpable de la formación del ozono, es la luz ultravioleta. En la estratosfera existen dos formas distintas de oxígeno: el O2, u oxígeno normal, el cual está formado por dos átomos de oxígeno y el O3, u ozono, que se encuentra formado por tres átomos de oxígeno.
Para llevar a cabo la transformación de un oxígeno en el otro, es decir, O2 a O3, es necesaria la participación de la luz intensa de tipo UV, procedente del Sol. Con la luz UV, los enlaces O-O, se destruyen, formándose un átomo de oxígeno que reaccionará con el oxígeno, formando el ozono.
De igual manera, el ozono se destruye mediante fotolisis, cuando los enlaces O-O del ozono, debido también a la luz del sol, se rompen, de éste modo, el átomo que se ha formado reacciona con otro ozono, dando lugar a la formación de dos moléculas de O2.
En los trópicos, la radiación solar es más intensa lo que implica que sea propio en esas zonas donde se forme mayor cantidad de ozono, sin embargo, la luz solar en los trópicos, no provoca solamente la producción de O3, sino también hace que se eleve el aire de la troposfera.
El O3 viaja desde el ecuador hasta los polos, donde se produce la acumulación de éste, siendo en invierno cuando más bajan los valores de O3 en los polos, debido a la escasa formación a consecuencia de la noche polar, que hace que haya ausencia de luz solar.
La luz UV, que sirve para la formación del ozono, es también absorbida por otro tipo de moléculas, lo que provoca una serie de consecuencias como:
- La superficie terrestre se encuentra protegida de la luz UV, gracias a que ésta no consigue alcanzarla debido a la absorción por dichas moléculas.
- El ozono que se puede acumular es limitado, viéndose aumentada su concentración casualmente cuando mayor riesgo de descomposición existe, hecho que lleva a la existencia de un equilibrio.
- La energía contenida en la luz UV se transforma en radiación calorífica, lo que lleva al calentamiento de la capa (estratosfera), siendo esta la razón del porqué se invierte la temperatura en la tropopausa.
Las unidades de medidas para el Ozono son los Dobson (DU), y su valor generalmente es de 300 DU. Este valor se explica si suponemos que todo el O3 se encuentra repartido por la capa de la estratosfera, y tan solo el 10 % se encuentra en la troposfera.
La capa de ozono, también conocida como ozonósfera, es la zona de la estratosfera que posee una mayor concentración de ozono. La ozonósfera se extiende desde los 15 a los 40 Km. de altura aproximadamente, y es en ella donde se concentra la mayor cantidad de ozono de toa la atmosfera, en total un 90 %, siendo por consiguiente en ella donde se absorbe la mayoría de la radiación ultravioleta.