Ácido fórmico
El ácido fórmico, también conocido bajo el nombre de ácido metanoico, es un ácido de la química orgánica, que se encuentra constituido por, solamente, un carbono, por lo cual, es uno de los ácidos orgánicos más simples que podemos encontrar. En cuanto a su fórmula química, ésta es bastante simple, pues contiene el grupo funcional ácido, unido a un hidrógeno, es decir, H-COOH o CH2O2.
El ácido fórmico presenta un estado de agregación de tipo líquido. Además es un líquido carente de coloración, que puede ser disuelto en el agua con facilidad debido a la corta medida de su cadena de carbonos. Su olor es bastante irritante Posee unos puntos de fusión y ebullición no muy altos, siendo estos de 8ºC y 101ºC respectivamente.
Este ácido consiguió ser aislado por vez primera en el año 1671 por el inglés John Ray, naturista y considerado uno de los padres de la botánica actual. Este naturista consiguió destilar el ácido fórmico, partiendo de insectos, concretamente de hormigas rojas trituradas, de ahí el hombre de “fórmico” ( formica, del latín hormiga). Dicho ácido es la sustancia que algunos insectos, como hormigas o algunas abejas, nos inyectan cuando nos pican o muerden.
El ácido fórmico se encuentra presente también de manera natural en las mieles y ciertas plantas siendo, junto a otros compuestos, el causante de los picores que producen algunas plantas como las ortigas. Existen bacterias que producen ácido fórmico partiendo del piruvato o ácido pirúvico, a través de una reacción de tipo catalítica generada por la enzima conocida como, piruvato- formatoliasa. Este ácido también ha sido hallado en la composición de la cola del cometa Hale-Bopp, o en zonas de la troposfera, siendo incluso participante en la conocida lluvia ácida.
Artificialmente, el ácido fórmico se sintetizó por primera vez a manos del químico de origen francés Théofile-Jules Pelouze, en torno al año 1831, partiendo de las reacciones entre el ácido cianhídrico y el clorhídrico, junto con ácido sulfúrico concentrado. En la actualidad se siguen los métodos utilizados para la síntesis artificial empleados por Berthelot.
En el ácido fórmico, es el grupo carboxilo el responsable de otorgar un carácter ácido a dicho compuesto. Además, la base conjugada de este se estabiliza con sus estructuras resonantes, hecho que favorece la acidez del ácido fórmico. Los derivados del ácido fórmico, como sus sales y ésteres, se conocen con el nombre de formiatos.
El ácido fórmico presenta un valor de pKa de 3.75, si sabemos que el valor de pH varía entre 0 y 14, se dice que el ácido fórmico, incluso siendo su origen natural, es considerado un ácido fuerte. Cuando este ácido se encuentra disociado en agua, reacciona disociándose de la siguiente manera:
HCOOH + H2O → HCOO- + H3O+
Cuando trabajamos con ácido fórmico, debemos manipularlo con atención y uso de guantes, pues el contacto directo de este ácido con la piel provocaría de forma rápida quemaduras con serias ampollas. Cuando existe una larga exposición a la inhalación de este ácido, existe la posibilidad de padecer edema de pulmón, o incluso shock y fallo respiratorio. Además, su ingestión provoca vómitos, dolor en abdomen y quemaduras en el aparato digestivo, pudiendo complicarse hasta el punto de ser mortal.
Como ya hemos comentado, es un ácido fuerte que debe ser tratado con cautela, y en los laboratorios al sufrir calentamiento junto con otros ácidos de tipo fuerte producen CO. También reacciona de manera violenta con diferentes sustancias oxidantes o bases de tipo fuerte, lo que puede dar lugar a riesgo de explosión o incendios.