Química

Morfina

Publicado por Ángeles Méndez

La morfina es una fuerte droga del grupo de las opiáceas, es decir, de los alcaloides presentes en el opio, que es una droga narcótica y analgésica extraída de la cabeza de las plantas adormideras (Papaver somniferum). La morfina se utiliza en el campo de la medicina como analgésico principalmente. El nombre de morfina fue dado por un farmacéutico alemán llamado Friedrich Willhelm Adam Sertürner, haciéndole un homenaje a Morfeo, dios de los sueños en griego, pero primeramente fue llamada “principium somniferum opii”, debido a las características narcóticas que poseía.

Como ya se ha mencionado, la morfina es un alcaloide del opio, preparado con sulfato a través de la neutralización con ácido sulfúrico. Esta sustancia está controlada pues siendo un opioide agonista se usa en la premedicación, en la anestesia y analgesia, así como en el tratamiento de dolores fuertes en ciertas enfermedades. Su aspecto es el de un polvo blanquecino y cristalino, sin olor y fácilmente soluble en agua.

La estructura molecular de la morfina es C17H19NO3, y según la IUPAC su nomenclatura sería, (5α, 6α)-didehidro-4,5- epoxi-17-metilmorfinan-3,6-diol. Esta sustancia se administra de forma sulfatada a una solubilidad de 60 mg/mL.

Primeramente fue administrado por vía estomago, y más tarde a través de la dermis. Consiguió mucha fama una vez inventada la jeringa, lo que hacía mucho más fácil y efectiva su aplicación, la cual comenzó a realizarse por los militares en la guerra de 1907. Fue a partir de 1951 cuando la síntesis química de la morfina, y también de sus derivados, fueron posibles. Actualmente se aplica generalmente por inyección, aunque también hay pastillas u parches transdérmicos. Los efectos de esta droga duran poco en realizar efecto, tan sólo unos 5 minutos, durando unas 5 horas su efecto.

En la actualidad, continua usándose como analgésico común, siendo el más eficaz a la hora de paliar dolores de gran agudeza, sin embargo su uso está decreciendo poco a poco a medida que se conocen nuevas drogas de origen sintético, siendo estas menos adictivas, o den menos alergia a personas con intolerancia a la morfina, de manera que todos puedan aliviar sus dolores de igual modo.

También es una droga utilizada para contraatacar las adiciones a algunas drogas fuertes como puedan ser la heroína o la cocaína.

La morfina se utiliza con fines médicos de manera legal, en diversas circunstancias, como por ejemplo de analgésicos a nivel hospitalario, así como distintos y múltiples dolores agudos de post-quirúrgicos, golpes, cáncer, y un largo etc. Pero como toda medicina posee contraindicaciones, como son la mala respiración, pancreatitis aguda, fallos renales, intoxicaciones, etc.

Son múltiples los derivados de la morfina, como por ejemplo: la heroína, etilmordina, el cual se utiliza como antidiarreico y analgésico, buprenorfina, folcodina, etc.

La extracción de la morfina no ha cambiado demasiado con el paso del tiempo. Cuando ya se ha secado el opio y se ha reducido a ese característico polvo blanco, éste debe ser consumido en cloroformo, para posteriormente diluir dicho residuo en agua o alcohol, precipitando por amoniaco y liberándose así, la morfina en forma de un polvo cristalino.