Química

Cloruro de amonio

Publicado por Mónica González

El cloruro de amonio, también llamado sal amoníaco o cloruro amoníaco, es, como indica su nombre una sal de amonio, y su fórmula química es NH4Cl.

Esta sal se obtiene a partir de la reacción de ácido clorhídrico y amoníaco.

Habitualmente lo encontramos en forma de polvo blanco o incoloro. Es inodoro e higroscópico (esto significa que tiene afinidad por la humedad ambiental).

Es soluble en agua, disociándose parcialmente, formando un ácido débil. Su solubilidad aumenta con la temperatura según la siguiente tabla:

A cero grado 29.7 gr. de cloruro de amonio en 100 gr de  agua
A veinte grados 54.6 gr  de cloruro de amonio en 100 gr de  agua
A ochenta grados 66.1 gr  de cloruro de amonio en 100 gr de  agua
A cien grados 73.0 gr  de cloruro de amonio en 100 gr de  agua

El cloruro de amonio se descompone si es sometido a altas temperaturas, liberando humos tóxicos e irritantes, como amoníaco, óxidos de nitrógeno y cloruro de hidrógeno.

Esta sustancia puede reaccionar con violencia en contacto con nitrato de amonio y clorato de potasio, causando explosiones y peligro de incendio. Se debe conservar en lugar seco y fresco, alejado de las sustancias con las que pueda reaccionar.

El cloruro de amonio tiene distintas y variadas aplicaciones, se usa en la fabricación de pilas secas, en los procesos de galvanizado y estañado de zinc, como fundente en soldaduras, como removedor de óxido en metales, también es utilizado en la industria textil, en alfarería, entre otros.

También tiene usos en el campo de la medicina, es este sentido, se ha usado cloruro de amonio como diurético, ya que en el cuerpo humano, aumenta la excreción renal de cloruros y sodio. Además, ha sido usado como expectorante, ya que irrita la mucosa  bronquial, aumentando la secreción de las sus glándulas.

El cloruro de amonio se absorbe con facilidad por la vía gastrointestinal, es metabolizado en el hígado y se excreta principalmente por la orina.

Su uso está contraindicado en pacientes con afecciones hepáticas, ya que  puede almacenarse y causar intoxicación por amoníaco.

El cloruro de amonio puede causar irritación de nariz y garganta, si es inhalado en forma de humo o polvillo, en grandes cantidades. También puede causar náuseas, vómitos, dolor de garganta, y acidosis. En caso de inhalación de esta sustancia, se recomienda trasladar al paciente a un lugar aireado. De presentarse dificultades respiratorias, administrar oxígeno o respiración artificial.

El contacto de esta sustancia con la piel y los ojos, también causa irritación, enrojecimiento y dolor. En  estos casos, se debe enjuagar la zona con abundante agua y jabón, al menos durante quince minutos.

Artículos recientes
Artículos más comentados
Artículos más leídos