Química

Oxicodona

Publicado por Mónica González

El Oxycontin es el nombre comercial de la droga hidrocloruro de oxicodona, fabricado por Purdue Pharma. El Oxycontin es una forma de liberación controlada de la oxicodona recetada para tratar el dolor crónico. Si es utilizado correctamente el Oxycontin puede aliviar el dolor por hasta 12 horas.

Actualmente se ha tenido mucha cobertura sobre la utilización de este compuesto debido a los relatos crecientes de su uso excesivo por personalidades muy conocidas.

De acuerdo con una ficha de información de la ONDCP (Oficina Nacional de Control de Drogas en USA) se estima que 1,6 millones de americanos usaron analgésicos que exigen receta por motivos no médicos por primera vez en 1998.

Además de esto, la ONDCP también relata que el número de casos de emergencia causados por el uso de oxicodona aumentaron en casi 36% en un único año (de 1999 al 2000).

La oxicodona es considerada una sustancia controlada de Nivel II de acuerdo con la CSA (ley americana de sustancias controladas), lo cual significa que está bajo control legal de la DEA, entre otros departamentos de control de drogas.

Uno de los principales factores que dictan el grado de control de la droga es el potencial que ella tiene para su uso indebido.  Luego que la droga ha sido clasificada como una sustancia controlada, queda sujeta de un sistema formal que requiere registro, mantenimiento de información, restricciones en su distribución, seguridad en la fabricación e informes que se deben presentar a la DEA.

Podemos cuestionarnos el porqué de tanto control sobre un medicamento que ayuda al paciente a sentir menos dolor, pues bien, veamos de que se trata la oxicodona y como es que funciona.

La oxicodona es un opioide agonista. Ellos son algunos de los analgésicos más eficaces que existen y diferente de los otros, tiene un efecto creciente conforme aumentan las dosis. Esto significa que cuanto más una persona tome, mejor se sentirá.

Ya, otros analgésicos como la aspirina o el acetaminofeno tienen un límite para su eficacia. Es posible ver el motivo especialmente para las personas que sufren dolores crónicos, por el cual el Oxycontin puede ser tan benéfico: el puede ofrecer un alivio cuatro veces mayor que le de un analgésico no-opioide, permitiendo reducir niveles más graves de dolor.

Luego que la oxicodona entra en el cuerpo, ella estimula ciertos receptores opioides localizados por el sistema nervioso central, en el cerebro y a lo largo de la médula espinal. Cuando la oxicodona se enlace a estos receptores, ocurren varias respuestas fisiológicas, desde alivio del dolor hasta respiración más lenta y hasta euforia.

Sin embargo, si es utilizada en exceso, la oxicodona así como otros opiatos y opioides, puede ser en extremo adictiva

 

En vez de ingerir la píldora como fue indicado por el médico, las personas que utilizan OxyContin indebidamente encuentran otros métodos de administración de la droga.

Como una forma de evitar el mecanismo de liberación controlada, acaban masticando inhalando o inyectándose el medicamento para obtener un efecto intenso e instantáneao. El uso frecuente y repetido de la droga puede hacer que el usuario desarrolle una tolerancia a estos efectos forzándose a tomar dosis más fuertes para conseguir la misma sensación y dejándolo cada vez más dependiente de la droga.

Términos Relacionados

Agonista: Droga que interactúa y combina con los receptores para iniciar su acción

Analgésico: Compuesto que alivia el dolor y altera la percepción de los estímulos relacionados con el, pero sin producir efecto anestésico o pérdida de conciencia.

Narcótico: Cualesquier droga de origen natural o sintética con efectos semejantes a los del opio y sus derivados.

Opioide: Cualesquier derivado del opio o cualquier narcótico con efectos semejantes a los de un opiato.

Opio

El uso del opio tiene una historia bien extensa. Se cree que las civilizaciones del antiguo Egipto y de Grecia utilizaban opio debido a sus efectos estupefacientes. Durante el siglo XIX, el láudano (opio disuelto en alcohol) y otros productos hechos con opio eran utilizados en Gran Bretaña y en América para tratar varias enfermedades, desde dolor de dientes en bebés hasta tos en niños y adultos.

Para generar el polvo de opio, se extrae el líquido lechoso de la semilla de la papola, volviendo posible el aislamiento de varios alcaloides para crear opioides como la morfina, codeína y oxicodona.

El alcaloide de la oxicodona por ejemplo es la tebaína.